jueves, 28 de diciembre de 2017

El habeas corpus y todos los que nos engañan

Que  no soy yo muy de política bien lo saben los que me conocen. ¡Pero oiga! Que cuando me encuentro con barbaridades, si no las cuento como que exploto. 

 La realidad supera la ficción, y eso es más cierto que el respirar. Uno está viendo la televisión y se encuentra con, (voy a llamarles )“directivos” al frente de un (voy a llamarle) “partido político”, en ese caso me refiero al denominado Partido Popular que dice algo así como que los casos de corrupción en su partido son de forma aislada y no hay que generalizar; te encuentras con el "se fuerte"; ordenadores que misteriosamente se borran;  miembros de partidos políticos que mueren inesperadamente cuando están citados para declarar (a mí este punto en concreto me da mucho que pensar eh?); ERE muy tonto que me quedo con lo que es de todos;  cuentas en otros países porque en el nuestro ya no les cabe el dinero (así es como yo le llamo);  o los de IKEA que vienen a montarte los muebles y se dejan dinerillo en el techo de los Pujol y luego están los protegidos por la  madre superiora que fija un matriarcado de alta calidad económica y que distribuye los titines y corta el bacalao, pero ojo que como le de por hablar a alguno de los "peces gordos" aquí se lleva premio hasta el gato. 

 La cara toooonta que se me queda cuando percibo esas palabras no es muy difícil de imaginar, pero lo cierto es que me indigna, me indigna darme cuenta de que hay muchos votantes de estos partidos que les creen, y están en todo su derecho, pero, por favor seamos consecuentes, veamos la realidad, los números sobre la mesa, las estadísticas. Y es que si hay algo que me molesta muchísimo es el engaño hacia el ciudadano, hacia el consumidor, hacia el espectador, como si fuéramos títeres. Los bancos nos engañan, la administración nos engaña, los “partidos políticos” nos engañan y siempre somos los mismos “engañados” a base de patrañas de todos ellos.

He hecho hincapié en lo de “partido político” porque hay otro tipo de partidos que prefieren definirse como “sociedades civiles” pero sin embargo forman parte de la estructura gubernamental, lo que es claramente contradictorio porque o se está o no se está pero las medias tintas no gustan a nadie. Y esto por si alguien se siente ofendido, que últimamente está la sociedad un tanto irascible, que lo mismo me da llamarle partido político que sociedad civil, para el caso el fin es el mismo: el engaño.

Con todo esto termino llegando a la  denominada CUP, como ya les he comentado no soy yo de política, por lo que siendo desconocedora del significado de dichas siglas y la curiosidad me puede,  he tenido que ir a coger información  del lugar del cual tiramos todos cuando no sabemos: del Wikipedia

Copio y pego:

La Candidatura de Unidad Popular​ (en catalán, Candidatura d'Unitat Popular), conocido simplemente por sus siglas CUP,​ es un partido político español​ de extrema izquierda, defensor de la independencia de Cataluña​ y de los territorios denominados "Países Catalanes".

Bien, aquí lo define como partido político (español), por lo menos no se considera una sociedad civil y parece que asume que forma parte de la estructura gubernamental de España. 

Y miren que de lo que no sé no hablo, y como no sé de carpintería no hablo de ello, me limito a escuchar y aprender, tampoco sé de mecánica, ni de medicina, ni de fontanería, por lo tanto no opino, escucho y aprendo. De lo que sé es de leyes, y de eso, normalmente, sí que hablo y a veces, incluso, hasta opino.

Se dijo ayer que dos concejales de la CUP eran detenidos, por un delito de odio. Madre del Señor! Qué cosas tan rápidas ocurren! Y yo tardo más de seis meses en una instrucción para que me citen al investigado! 

Después de que todos los seguidores de la CUP se manifestaran en redes sociales de “su derecho a sentir odio” (a ninguno le dio por ir a leer el significado del delito de odio) ya se formó un batiburrillo del tipo: no nos dejan expresarnos, no nos dejan sentir, no nos dejan sentir odio, yo quiero odiar pero España no me deja, los jueces no me dejan odiar!
Pero por favor! que desde "fuera" nos leen, que se lo creer, que esa es la imagen (irreal) que se está dando. Seamos serios ché!!

Finalmente, se (les) aclaró que la detención no era por un delito de odio, sino por desobediencia a Su Señoría, la cual había citado a los dos concejales en dos ocasiones (ojo al dato: DOS ocasiones) para que fueran a declarar, por un supuesto delito de odio (que no significa que no puedas odiar a nadie, que lo puedes hacer pero ya que estás te dejo el consejo de mi madre: el odio no es bueno, te envenena por dentro) y se pasaron la citación por el arco del triunfo. 

Claro!  entonces sí! Ahora ya es más comprensible! A Su Señoría no le toquéis las narices que no se anda con tonterías, dos veces te da la oportunidad de que vayas para que se te tome declaración, y pasas de él ¿qué esperas? ¿Qué te mande un whatsapp? ¿que te invite a cenar? Ya sabemos el motivo de detención. Todo lo anterior: mentira.

Llegados a este punto, lo siguiente que nos llega es que ambos concejales han pedido un habeas corpus, y que no les contestan. Mi cara: un poema. Y esto lo dicen así, sin más, sin miedo, sin temor a que alguien venga y les explique en qué consiste el habeas corpus, sin temor a que a algunos de sus seguidores les de por informarse en qué consiste aquella palabreja. Y efectivamente, nadie les explica nada y parece ser que tampoco va nadie a informarse. 

El habeas corpus se solicita cuando uno considera que se la ha detenido ilegalmente o que el plazo legalmente establecido de detención (72 horas) se ha sobrepasado. 
Como ustedes comprenderán, la detención de alguien que se realiza bajo una ORDEN JUDICIAL, otra cosa no, pero legal es, serlo lo es, vamos que Su Señoría tenía un par de razones (y nunca mejor dicho) para solicitar la detención de ambos concejales. Del plazo de detención creo que no es necesario explicación alguna. La petición de habeas corpus (claramente desestimada desde el minuto uno por lo que ya os he expuesto) hecha en el intento de no pasar la noche en el calabozo no “coló” porque Su Señoría sabe de lo que habla y el Fiscal también, y ya puestos y las horas que eran, cachondeo el justo. 

Me imagino a Su Señoría llamando al Fiscal:

-          Su Señoría: Oye! Aquí un iluminado que me ha pedido un habeas corpus, parece ser que la orden judicial por la que he pedido que me los traigan para declarar porque han pasado de mi cara en dos ocasiones, les parece que no es legal.
-          Fiscal: Vamos a ver……Ah claro, claro, eso de legal no tiene nada, bueno, pues ya  vamos por la anécdota número 54896155.
-          Su Señoría: ¿Qué hago? Nos esperamos un ratito más y hacemos un poco más larga la espera.
-          Fiscal: Vale, y a ¿qué dices que se dedican?
-          Su Señoría: Concejales de la CUP, un partido político español
-          Fiscal: ¿en serio? ¿y han pedido un habeas corpus teniendo una orden judicial de detención por incomparecencia en dos ocasiones?
-          Su Señoría: Sin palabras me he quedado! Muerto matao. 
-          Fiscal: Mira que son días de navidad, yo de ti les comunicaba ya el Auto de desestimación del habeus corpus, y para casa…
-          Su Señoría: Razón tienes!! Voy a ello

Mientras tanto en las redes sociales, en los medios de comunicación, los seguidores de la CUP, dentro de su conocimiento: ¡Que no les contestan al habeus corpus! ¡No nos hacen caso! ¡es porque somos de la CUP! España traidora! Llegué a leer auténticas barbaridades a través del twitter. En ese momento me vino a la cabeza la serie de House, aquel doctor tan peculiar que sólo él entendía su humor  y que parece ser que con sólo mirar al paciente ya sabía el diagnóstico, o la de Hospital con George Clooney, que vamos, me voy yo a urgencias y me encuentro un médico así y un poquito la enferma sí que me lo hago eh? (nótese la ironía). La de médicos españoles que se llevarían las manos a la cabeza con la de burradas que habrán visto en esas series y que los ciudadanos que no entendemos de medicina veíamos tan alegremente y con gran confianza de que así tal cual, funcionaban los hospitales en nuestro país.



Cuánta gente, que no entiende de leyes, (pero sí de muchísimas otras cosas), ayer creía que se estaba cometiendo una injusticia, una ilegalidad con los dos concejales, cuando fueron ellos mismos los que se negaron a asistir al llamamiento del Juez hasta en dos ocasiones, retardando así su declaración, porque no se olviden de que lo que han hecho hoy a las 9 de la mañana lo pudieron haber hecho en el primer llamamiento, pero si lo hubieran hecho, no hubieran montado el espectáculo del día.
Y no terminamos aquí, posteriormente, y tras conocer la desestimación del famoso” habeas corpus”, los simpatizantes de la CUP, el Ayuntamiento, el pueblo entero! (he llegado a leer), todos allí, frente a la puerta del Juzgado de instrucción en modo de queja, de concentración por un único motivo: le iban a tomar declaración a dos concejales de la CUP y eso no se hace porque aunque los concejales hayan dicho que no creen en la justicia española, que pasan de ella y no asisten a las citaciones porque no les da la gana, es de muy poca vergüenza detenerlos  y tomarles declaración ¿pero en qué país vivimos? ¿Cómo se nos ocurre tomar declaración a alguien que dice que se pasa a Su Señoría por el forro de los cojo……? Barbaridades hacemos en España! Finalmente, ambos deciden no prestar declaración, Su Señoría hace su trabajo que para eso está, y ambos concejales para casa. Menudo circo por algo que ocurre todos los días en los Juzgados de Instrucción. 


 ¿Se imaginan que cada vez que se le tome declaración a cada investigado se formara todo este campamento? Sería catastrófico ¿no? Pero es más que evidente que hay unos que son más privilegiados que otros, y que unos merecen más ruído que otros. Yo a mis clientes los trato a todos por igual, y todos me merecen la misma importancia. Nosotros, los abogados, no hacemos discriminaciones ni consideramos que unos sean mejores que otros por pertenecer a un partido político, religión, sexo, raza o lo que sea, miramos a todos por igual, no consideramos que ninguno esté por encima de nadie por eso siempre hacemos el mismo ruido: ninguno.
Creo que es ahí donde está lo justo, tratar a todos por igual y no a unos mejor que a otros y los partidos políticos discriminan, sí, discriminan haciendo creer que los "suyos" son mejores, pero para las elecciones nos venden que lo más importante son los "ciudadanos" por los que dicen que tanto miran. Mentira. 

Y nos quejamos de que nuestro sistema de justicia esta politizado, claro! todo está politizado! Todo! y cuando veo a partidos políticos criticar al sistema por politizado, ese mismo partido que pide un habeas corpus o hace una congregación porque se va a tomar declaración a uno de sus miembros ¿a eso cómo se le llama? Todo está infectado, el problema es que cuando les pasa a los demás no me importa sólo importa cuando me pica a mi.
Me viene a la mente la carta de Junqueras que escribía por Navidad, por aquello de que sólo puede ver a sus hijos dos horas al mes y me pregunto ¿le importaba esto hace unos meses cuando el andaba por la calle tan feliz? ¿le importaba la situación familiar de aquellos presos, que en su misma situación, sólo han podido ver a sus hijos dos horas al mes, tanto en Navidad como el resto del año? ¿le importaba la situación de los hijos de los otros presos? Claro que no! Le importa ahora, pero la suya, su situación. Jamás le he visto hacer una propuesta, dentro de nuestra estructura gubernamental, para cambiar la situación familiar de los ciudadanos que se encuentran en prisión, porque antes que él, esta situación ya se daba, y se da y se dará, pero los ciudadanos no importan,  porque no se olviden de algo: dentro de TODOS los partidos políticos es tal la magnitud de mezquindad que se usa hasta los propios hijos para crear política. 

Y esto es lo triste. La Administración nos engaña. Los bancos nos engañan. Los partidos políticos nos engañan. Y yo estoy hasta la mismísima peineta de tanto engaño. Aprendamos a pensar por nosotros mismos, a buscar información, a preguntar, a no creer todo lo que nos venden aquellos que se creen estar por encima “del bien y del mal”, aprendamos a decidir por nosotros mismos, a “pasar” de partidos políticos, de bancos, de administraciones, a comenzar a saber, a leer, a emprender, no hay mayor poder para un Estado (administración, bancos y partidos políticos) que el desconocimiento de sus ciudadanos, ya es hora de que dejen de tomarnos el pelo. 

Y que no todo sea malo en lo que he escrito hoy, que si hay algo que me ha parecido fabuloso y una total genialidad ha sido Tabarnia, porque Tabarnia me ha enamorado: su gente, su tierra, su bandera, su gastronomía! Viva Tabarnia y viva la genialidad de su gente! Yo sí quiero que Tabarnia se quede con nosotros! ya era hora de ponerle una guinda de genialidad a toda esta situación!

Feliz noche y no se olvide de pensar por usted mismo.




lunes, 18 de diciembre de 2017

Ay! ¿y si toca?!!


               Se acerca el día más esperado por muchos de nosotros en el que estamos pendiente de la televisión y de la radio para comprobar, con toda la ilusión del mundo,  si este año, por fin! Vamos a ser los afortunados!
Pero….. si nos toca y ese premio tenemos que compartirlo ¿cómo lo hacemos? ¿cómo tributa? ¿lleva algún tipo de gasto?  Parece sencilla la respuesta pero, en realidad, no es tal que así.

Lo que en principio puede ser motivo de alegría puede terminar en un auténtico quebradero de cabeza o incluso terminar en los Juzgados. Podemos encontrarnos con casos en los que un décimo que siempre se ha compartido, pero casualmente,  uno de los comuneros olvidó pagar su parte proporcional en el décimo y al salir premiado se queda sin su premio ¿le parece justo? 

O esa madre que le toca la lotería y decide repartirla con sus hijos pero cuando pasa por Hacienda le liquidan el impuesto de donaciones y los hijos se desentienden para que la que haga frente a ese impuesto,  de forma íntegra, sea la madre, ¿le parece justo? ¿Cree que el mayor premio es compartirlo? 


Le parezca lo que le parezca, lo cierto es que antes de ir a cobrar el maravilloso premio, es mejor que nos asesoremos.

No olvidemos que los décimos de lotería son un “título al portador”, esto quiere decir que quien lo tiene en su poder es su propietario, por lo tanto el resto de acciones que se hagan con anterioridad o con posterioridad, a resultar premiado, es lo que va a determinar si ese premio es compartido o no. Lo que quiero decir, que si el décimo no lo tiene usted pero ha participado en la compra del mismo,  por mucho que uno confíe y se fíe, si se participa en un décimo lo que hay que hacer es dejar constancia de ello, (hacer fotocopia del décimo,  poniendo la firma por detrás del décimo de todos los que participan, o haciendo un listado en el que cada participante, cuando vaya a pagar su parte proporcional del décimo, firme en el momento del pago,  o mandarlo a un grupo de whatsapp, por ponerles unos ejemplos) y con el fin de que no quepa duda de que dicho décimo es compartido, no sólo para los que participan, sino también para el que lo cobra porque no es lo mismo, para Hacienda, que usted cobre 10.000,00€ a que cobre 50.000,00€.
Si estamos casados en gananciales y nos toca el premio de lotería nacional, debemos saber que la mitad es de nuestro cónyuge, aunque estemos en trámites de separación de bienes o de divorcio. Si estamos casados en separación de bienes y nos toca el premio de lotería nacional y se demuestra que existe una comunidad de bienes entre los progenitores, la mitad del décimo es del otro cónyuge, es más, si somos pareja de hecho y existe una comunidad de bienes, la mitad del décimo es de nuestra pareja.
Uno puede pensar que si se queda con el décimo y no lo reparte no le pueden “pillar” y nada más lejos de la realidad, los testigos junto con la correspondiente documental  son totalmente válidos en este tipo de situaciones, y es que quedarse con el premio de un décimo de lotería a sabiendas que debe de ser compartido bien puede constituir un delito de apropiación indebida que puede ser castigado con pena de prisión de seis meses a tres años y si se supera la cuantía de 50.000,00 euros se usará agravante para elevar esa pena.
No olvidemos que si nos toca la lotería debemos de tributar por ella. A partir de 2500 euros, (son 2.500 euros por boleto, no por agraciado)  el 20% se lo debes de dar a Hacienda y si además quieres darle un “pellizquito” a alguien de tu familia, recuerda que junto a ese 20% tendrás que tributar por el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Por lo tanto siempre será mejor compartir el premio identificando nombre y DNI que dar un “pellizquito”.
Debe de tenerse en cuenta que el depositario del décimo o la persona encargada de cobrarlo será a la que se le aplique esta retención del 20%. Si esa persona procede a repartir el premio sin más, entonces tendrá que tributar por el impuesto de sucesiones y donaciones, por eso es muy conveniente demostrarle a Hacienda que ese premio en realidad era una participación y no se lo ha quedado de forma íntegra quien poseía el décimo ¿Cómo lo demostramos? Pues nos vamos todos los participantes del décimo al banco y será el propio banco el que identificará a las personas agraciadas y les dará su parte proporcional. Si el banco no lo hace, no hay ningún problema,  Hacienda pone a nuestra disposición unos formularios que podemos rellenar comunicando que hemos recibido el premio, aportaremos nuestros datos fiscales y el comprobante de tener recibida la cuantía correspondiente.
El destino del dinero dependerá de la situación económica de cada uno. Si decidimos destinar el premio en un plazo fijo, las intereses que obtengamos por ello van a tributar. Sin embargo, existe una serie de productos en los que la inversión en ello no tributa cuando se cumple determinados requisitos, así los Planes de Ahorro 5 o los PIAS (Planes Individuales de Ahorro Sistemático) o que incluso desgravan como los planes de pensiones.
Si tienes derecho a deducción por vivienda  también puedes amortizar hipoteca y deducirte  el 15%.



Con todo esto parece que si nos toca la lotería no todo es coser y cantar, más bien debemos de pararnos y sacar cuentas para comprobar, desde el punto de vista fiscal,  qué puede ser lo más beneficioso. ¿no creen?
Si este año es usted el agraciado no dude en consultar con un experto en la materia para que pueda orientarle y asesorarle fiscalmente.
Feliz Navidad y que la suerte os acompañe!!!